La transformación del mercado ha llevado a la aparición de servicios digitales low-cost como posible parte de la estrategia de marketing digital de una empresa. Sin embargo, cuando dejamos que cobre una mayor relevancia el coste de nuestras acciones que la calidad de las mismas estamos cometiendo un grave error.
No es complicado encontrar a través de motores de búsqueda empresas que oferten un servicio de marketing de contenidos, diseño web o gestión de redes sociales, entre otras cosas, a bajo coste. Pero el problema principal que hemos tardado menos de un segundo en preguntarnos es ¿dónde se encuentra la estrategia en todo esto? Solo entendiendo cuáles son las necesidades de una organización y llevando a cabo un análisis en profundidad es posible establecer una estrategia alineada con los objetivos de tu compañía y, en el caso de las empresas externas que suministramos este tipo de servicio, conocer el coste para poder dar un servicio de calidad óptima que supla las necesidades detectadas.
El peso que adopta -cada día más- el mundo digital, ha hecho que las empresas tengan que adaptarse a las nuevas formas de comunicar e impactar sobre su público objetivo. Algunas soluciones que adoptan las compañías, es buscar el proveedor más barato para esta clase de servicios. Estos intermediarios suelen rebajar su fee en detrimento de la calidad del producto. No obstante, si te ofrecen un servicio sin un plan de acción detallado, desconfía de que sea lo que andas buscando. Pese a que las compañías comienzan a valorar entre sus necesidades el hecho de tener y gestionar su presencia online, no debemos confundir esto con dar esta responsabilidad a una estrategia low-cost que, posiblemente, no monitorice el crecimiento y alcance de sus acciones.
Con el objetivo de fomentar la venta directa
No es ningún secreto que, la estrategia que más valoramos en thinkIN, es fomentar la venta directa de los alojamientos turísticos que han depositado su confianza en nosotros. Esta forma de trabajar requiere un exhaustivo compromiso donde se alinean varios de nuestros departamentos para alcanzar este fin.
Desde las publicaciones en redes sociales que buscan conectar el destino, características de las zonas comunes,habitaciones del hotel, actividades, servicios complementarias, etcétera; pasando por la estrategia de ads que impacta en origen y se posiciona de forma óptima en los motores de búsqueda; el estudio de palabras claves que desarrolla los textos de una web y blog con términos de búsqueda altamente utilizados; hasta un diseño responsive, una web rápida y un motor de reservas que no requiera excesivos clics para completar tu proceso de reserva; todos los departamentos implicados trabajamos con un objetivo común, algo que, sin duda alguna no cubre un servicio low-cost.
Solo los alojamientos turísticos completamente implicados con su presencia digital son capaces de entender que, una cosa es publicar en redes sociales ‘sin ton ni son’ y otra muy distinta es que cada publicación esté medida y pensada para que sea la punta del iceberg de un largo proceso que se complementa para conseguir un fin. Confiar tu estrategia digital al postor más barato, puede ahorrarte dinero a corto plazo pero sin duda no generará un ROI como el que se trabaja cuando las acciones persiguen un objetivo.